El Pensamiento Concreto en los Niños
Los niños menores de 7 años tienen un nivel cognitivo pre-abstracto. Es decir, su entendimiento es concreto, o dicho de otra manera, sus comportamientos y forma de pensar se basan en experiencias. Siento decirles que, los niños menores de 7 años, no pueden manejar conceptos abstractos como el razonamiento.
Los padres de familia me dicen: “¿Cómo que no, Dr. Lopez? Le decimos: Mira Tristán, no cruces la calle porque hay carros y te pueden atropellar. Y, si le pregunto, Tristán claramente repite: si voy a la calle me atropellan.” Pues, lamento decirles que hasta ahí llega la capacidad de Tristán. Simplemente repite lo que le dijeron. Los niños a esas edades no tienen la capacidad de manipular la idea o enseñanza que se les dijo y, analizar posibles ocasiones de cuándo lo van a atropellar, qué carros, a qué velocidad, si todos los carros lo pueden atropellar, si todas las calles son las mismas, etc, etc, etc.
¿Qué pasa al tratar de disciplinar usando el razonamiento? Que los niños no siguen la instrucción que les dieron sus padres. Y, como padre es extremadamente tentativo volver a explicar la situación, y en lo que menos piensas ya estás corrigiendo el comportamiento otra vez. Le das amenazas, utilizas frases como: “no te lo voy a volver a decir, si lo vuelves a hacer va a pasar tal o cual”. Te frustras, y el pobre Tristán sigue sin entender… pero, no es su culpa. Es una consecuencia de su edad y su capacidad cognitiva. Algo importante es que con el tiempo, esta práctica genera alta frustración y enojo por parte de los padres. Tristán al no saber qué está haciendo mal, siente rechazo. Además, estos múltiples intentos de razonar con tu niño terminarán afectando su autoestima, ya que hay una connotación condescendiente. Pero no te preocupes. Ahora te cuento cómo hacerle para evitar esta frustración.
Entonces, si razonar no sirve con los niños pequeños… ¿Qué hago? ¡Repetir! Hay que repetir y practicar los comportamientos adecuados una y otra vez. Experimentar qué se debe hacer es lo que lo va a llevar a dominar los comportamientos esperados/apropiados. Siguiendo con el ejemplo anterior: (siempre tomando en cuenta la seguridad de tu niño) lo que tienes que practicar es: Detenerse al final de la banqueta y decir: a la calle no se va. Si tu niño se va a la calle hay que proveer disciplina de manera neutra como un #Time-out. De igual manera, cada vez que vaya hacia la calle pero se detenga antes de llegar, hay que darle un Halago.
Ahora sí, inténtalo y no te desgastes con todo el razonamiento que tratas de hacer con tu niño. Tampoco te frustres porque esto toma tiempo y práctica. Repite y repite: caminar en la banqueta, detenerse y, no bajarse a la calle. Disciplinando y halagando. Revisa mis otras publicaciones: Time-In y Time-Out.
¡Ojo! No es de esperarse que un niño pequeño vaya a dejar de hacer algo que juzgas como inapropiado con experimentarlo una sola vez. Como lo mencioné anteriormente, los niños pequeños aprenderán de la experiencia y la repetición. Aprenderán al hacerlo mal varias veces y bien varias veces, antes de dominar cualquier comportamiento apropiado. Recuerda, es muy importante ser paciente y consistente en cómo respondes cuando hacen las cosas bien o mal.
Dr. Raymundo López