Lee este artículo. Después apaga tu teléfono o computadora y práctica: El Juego Dedicado
Una estrategia muy efectiva para estimular comportamientos adecuados en niños menores de 5-6 años es: “El Juego Dedicado”.
Así como los padres de familia queremos que nuestros niños nos presten su atención al 100% en múltiples ocasiones. Nuestros niños también necesitan de esa atención al 100%. ¿A qué me refiero con esto? Te invito a que durante todos los días alrededor de la misma hora, durante 10-15 minutos, te dediques a jugar con tu hijo. Déjalo ser el líder, escoger qué jugar y acóplate a su juego. Simplemente verifica que su juego sea seguro y no termine en comportamientos antisociales extremos. Apaga tu celular durante este tiempo, no pasa nada si no subes un video, fotos, o Instastories.
Si tú como padre exiges esa atención al 100%. Tu niño también necesita de esa atención especial: “El Juego Dedicado”.
Este tipo de juego lo utilizan mucho los psicólogos para establecer y fortalecer la relación entre padres e hijos. Son también estrategias utilizadas en terapias de comportamiento como PCIT (Parent Child Intervention Therapy).
Aquí te van los tips de cómo practicar el Juego Dedicado:
- Incluye las técnicas que he mencionado en otras publicaciones, como:
- #El poder de la descripción
- “Time-In” o Halagos
- Cómo dar instrucciones a los niños
- Evita hacerles preguntas constantemente: “¿Y qué estás haciendo?, ¿A qué estás jugando?, ¿Por qué esto o lo otro?” Cuando los niños tienen entre 1- 6 años, están aprendiendo a hablar, y aprenden mucho más de la descripción o comentarios directos que de preguntas. Es mucho más informativo para ellos y aprenden más cuando les das opciones: “Podemos jugar al picnic o a las escondidas”; y/o cuando les das comentarios directos al describir su juego: “Se subió el muñeco a la casa y está haciendo una comida”. “Está haciendo sopa… Podría ser de tomate o de pollo…” etc.
- Imita comportamientos apropiados. Si te fijas en el juego de los niños, frecuentemente se imitan unos a los otros. Cuando juegues con tu niño haz lo mismo. Si están mezclando algo para hacer un pastel, hazlo a su mismo ritmo, dale el liderazgo como lo dije anteriormente, tampoco hagas las cosas mejor o más rápido que él para evitar convertirlo en una competencia y pierda motivación. El imitar sus comportamientos adecuados, te ayuda a contrastar la atención que no le darás cuando demuestre comportamientos inapropiados. Un ejemplo de lo anterior es: tirar juguetes o hacer un tiradero con el agua.
- No, no, no- Doble y triple negación. A veces me pregunto por qué los niños dicen primero “No” antes que “Sí”. ¿Será porque frecuentemente les decimos qué no hacer o que las cosas no son de tal manera? La realidad es que tu niño no aprende al hacerle saber lo que hizo mal: “No #Tristán, la pelota no es de color rojo, es azul”. Por más que quieras usar un tono lindo y bonito, hay una connotación negativa en la oración, y el escuchar demasiado “no” afecta el autoestima de los niños. Especialmente a aquellos niños con problemas del desarrollo y altos niveles de hiperactividad. Como te mencioné, no es necesario decirles: “No esto o lo otro”. Con simplemente imitar/reflejar lograrás hacer tu punto. Siguiendo con el ejemplo anterior, una mejor respuesta que termina en una connotación positiva es: “Tristán dijo que es rojo. “¡Esta pelota es azul!”. Tristán repite: “Azul”. Bríncate el paso del “no” y simplemente dile lo que es o qué hacer.
Ahora, un ejemplo de cómo se vería el Juego Dedicado con Tristán:
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-Tristán: “Quiero jugar a cocinar”.
-Padre (Refleja y Describe): “Tristán quiere cocinar. ¡Vamos a cocinar!”
(Tristán empieza a hacer una sopa).
-Padre (utilizando la técnica de la descripción): “Mmmm que rica sopa, Tristán.” “Tristán la está revolviendo”, “Está haciendo círculos con la cuchara” “Wow, está haciendo una sopa de verduras”.
-Padre (utilizando la técnica del “Time-In”): “¡Mira qué bien estás jugando a la sopa!” “Le compartiste a mamá, papá y a tu hermano.” “Tristán le prestó una cuchara a su hermano” “¡Qué bueno eres para compartir!”.
(En eso, Tristán agarra y le echa agua a su sartén. Tristán empieza a tirar agua al piso.)
Padre (utilizando la técnica de la descripción): “¡Uy! Se cayo agua al piso”.
Padre (utilizando la técnica de instrucción dirigida): “El agua va dentro del sartén” “Revuélvela con la cuchara”.
Padre (utilizando la técnica del “Time-In”): “Mira qué bien revuelves la sopa con tú cuchara”.
(Tristán vuelve a tirar agua)
Padre (utilizando la técnica de imitar comportamientos adecuados, no reacciona a eso y modela otros comportamientos más apropiados): “Yo voy a empezar a hacer un pastel de chocolate”.
(Tristán se interesa)
Padre (utilizando la técnica de la descripción): “Sí, Tristán me va a ayudar”.
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Hay ciertas terapias de comportamiento que se enfocan en enseñar y practicar estas estrategias en los padres de familia. No es fácil. Se escucha sencillo pero, es intenso. En mi experiencia, muchos papás sólo pueden mantener el uso de estas estrategias por 5 minutos durante las terapias. Después de este tiempo, se distraen o pierden el hilo del juego. Dominar estas estrategias toma tiempo y mucha práctica. Haz tu acordeón y ten en mente estas 4 técnicas. Son excelentes para estimular comportamientos pro sociales.
Así como insisto que los padres deben hacer Time-In antes de Time-Out o castigos, de igual manera hay que practicar el Juego Dedicado lo más que puedan.
Si encuentras una dificultad enorme en tratar de interactuar y jugar con tu niño por un periodo corto y/o tu niño tiene comportamientos muy agresivos, tiene demasiada hiperactividad, una atención corta, no parece entenderte cuando juegas con él, tiene retrasos del lenguaje o no tiene juego funcional (juega de una manera extraña o repetitiva y sin imaginación) consulta a tu médico o a un psicólogo infantil.
Dr. Raymundo Lopez
Muchas felicidades me encanto esta parte
No, no, no- Doble y triple negación. A veces me pregunto por qué los niños dicen primero “No” antes que “Sí”. ¿Será porque frecuentemente les decimos qué no hacer o que las cosas no son de tal manera? La realidad es que tu niño no aprende al hacerle saber lo que hizo mal: “No #Tristán, la pelota no es de color rojo, es azul”. Por más que quieras usar un tono lindo y bonito, hay una connotación negativa en la oración, y el escuchar demasiado “no” afecta el autoestima de los niños. Especialmente a aquellos niños con problemas del desarrollo y altos niveles de hiperactividad. Como te mencioné, no es necesario decirles: “No esto o lo otro”. Con simplemente imitar/reflejar lograrás hacer tu punto. Siguiendo con el ejemplo anterior, una mejor respuesta que termina en una connotación positiva es: “Tristán dijo que es rojo. “¡Esta pelota es azul!”. Tristán repite: “Azul”. Bríncate el paso del “no” y simplemente dile lo que es o qué hacer. Nop nooo nooo